Ensayo sobre la enfermería


Introducción de Ensayo sobre la enfermería

El cuidado como actividad ha existido desde los albores de la humanidad. Siempre ha habido personas que no podían mantenerse por sí mismas, por lo que siempre ha habido necesidad de cuidar a los más desvalidos. Así pues, la enfermería se ha originado, está conectada y ha estado asociada a la humanidad desde tiempos inmemoriales. Para dilucidar sus orígenes, su evolución académica y su contribución a la atención sanitaria desde su inicio hasta el presente, la enfermería debe describirse en términos de un relato histórico de sus hallazgos y desarrollo.

Desde esta perspectiva, se considera que la investigación histórica es la base de una metodología que conduce a la caracterización de la identidad profesional de individuos y grupos en un contexto social determinado. También proporciona una base para identificar los orígenes, el desarrollo y la estructura de la profesión a lo largo del tiempo y facilita la construcción de una documentación histórica adecuada en el ámbito de la enfermería.

Desarrollo de Ensayo sobre la enfermería

El Día Internacional de la Enfermería se celebró ayer, como cada año el 12 de mayo, en memoria de Florence Nightingale, una figura fundamental en la historia de la enfermería, considerada por muchos como la madre de la profesión. Hija de una familia inglesa acomodada, nació en Florencia (Italia) en 1820, pero creció en Inglaterra y fue autora de varios libros y obras sobre la disciplina. Durante la guerra de Crimea, entre 1854 y 1856, era conocida como “la mujer de la lámpara” por sus rondas nocturnas atendiendo a los pacientes.

La contribución de Nightingale a la reforma educativa y médica ha sido enorme. Estuvo en el origen de la teoría ecológica, que sostiene que las condiciones ambientales influyen en la vida y el desarrollo de los organismos vivos y que su manipulación, correcta o incorrecta, puede prevenir, detener o favorecer la enfermedad e incluso la muerte. Esta teoría se basa en cinco elementos básicos que contribuyen a un medio ambiente sano: aire limpio, agua limpia, tratamiento de aguas residuales, saneamiento y luz.

A lo largo de la historia, la enfermería ha desarrollado su contenido funcional del mismo modo que la medicina y otras profesiones, de modo que hoy su historia puede justificar esta evolución, que se ha hecho irreversible, para convertirse en una profesión sin perder su singularidad esencial: la enfermería. Según los historiadores, la enfermería como ocupación ha existido desde los albores de la humanidad, porque siempre ha habido personas entre los humanos que no podían cuidarse a sí mismas, y siempre ha habido necesidad de cuidarlas.

En un recorrido intelectual horizontal desde Florence Nightingale hasta nuestros días, algunas teorías de enfermería insisten en sus supuestos de que “… La enfermería es una ciencia y un arte… “, haciendo hincapié en la enfermería como objeto de estudio y en la razón de ser de la misma…”. Se hace hincapié en la enfermería como objeto de estudio y razón de ser de la misma.

La enfermería es una ciencia reconocida desde mediados del siglo pasado, con un sistema conceptual y teórico propio que sustenta sus principios y objetivos y que se actualiza constantemente a través de la investigación científica; también tiene su propio método científico de actuación, el proceso enfermero, que incluye técnicas y procedimientos específicos destinados a cuidar la salud de las personas.

La enfermera inglesa Florence Nightingale (1820-1910) fue considerada durante mucho tiempo una pionera en el trabajo y la misión de las enfermeras. Durante la guerra de Crimea organizó y mejoró considerablemente las condiciones sanitarias en el campo de batalla y escribió varias obras sobre estas reformas.

1 Una perspectiva importante sobre la función de la profesión y su desarrollo surgió en los años 50 con la aparición de una filosofía de la profesión que pretendía dar a la enfermería una identidad propia dentro de las profesiones sanitarias. El primer modelo conceptual de la enfermería se publicó en 1952 en un artículo de Hildegarden Peplau titulado Human Relations in Nursing. Ese mismo año apareció la revista Nursing Research, que se convirtió en el principal difusor de información en el ámbito de la investigación. En 1955 apareció la teoría de la “Definición de Enfermería” de Virginia Henderson, que fue adoptada por el Consejo Internacional de Enfermería en 1961. Estas y otras teorías que surgieron en la segunda mitad del siglo pasado fueron de gran importancia para la profesión y contribuyeron al desarrollo epistemológico de la ciencia de la enfermería.

Hay varias teorías que consideran la enfermería como un arte y una ciencia. Esto puede confirmarse analizando la definición de enfermería en sus supuestos teóricos.

Desde Florence Nightingale en adelante, todos los modelos teóricos y conceptuales implican cuatro metaconceptos: las personas, el entorno, la salud y los cuidados, que son el centro de los intereses de la enfermería, donde los cuidados son el objeto de estudio y la razón de ser de la enfermería.

La enfermería, como ciencia humana práctica, es un cuerpo organizado de conocimiento abstracto sustentado en la investigación científica y el análisis lógico. Dispone de teorías y modelos que proporcionan el marco teórico necesario para mejorar su práctica diaria mediante la descripción, predicción y control de los fenómenos.

La ciencia de la enfermería se basa en la teoría integral aplicada a la práctica del proceso de enfermería, proporcionando los mecanismos por los que los profesionales utilizan el juicio, el conocimiento y las habilidades para diagnosticar y tratar las reacciones humanas en individuos, familias o comunidades. Roger afirmó en 1967 que “sin la ciencia de la enfermería no hay práctica profesional “3. 

El cuerpo de conocimientos de la enfermería surge de las teorías generales aplicadas de las distintas ciencias, de los fundamentos de otras disciplinas y de sus propios conceptos, que le confieren un estatus profesional independiente.

La enfermería se basa en la teoría, que guía su práctica. La enfermera utiliza el poder de esta teoría en su trabajo diario de enfermería, aunque no se dé cuenta. Leonardo da Vinci: afirma: “…… La práctica sin teoría es como un hombre que se hace a la mar sin un mapa; es un barco sin timón …… .” . 3 Desde un enfoque científico de la acción (el proceso de atención), los profesionales necesitan conocer los antecedentes y las características personales de la persona, familia o grupo social para realizar una adecuada valoración holística que les permita identificar las necesidades afectadas y desarrollar un plan de atención que ayude a satisfacerlas. Deben tener como objetivo mantener y preservar la integridad corporal, las creencias y los valores personales. 4 

La enfermera también es responsable del proceso de enfermería, ya que la profesión requiere formular y reflexionar sobre su propia filosofía.

La filosofía de la enfermería incluye las creencias y el sistema de valores de la profesión; también incluye una búsqueda constante de conocimiento y, por lo tanto, determina la forma de pensar sobre los fenómenos y, en gran medida, la acción, que es un elemento extremadamente importante de la práctica profesional.

El arte de la enfermería es la aplicación creativa y estética de la ciencia enfermera. Se plasma en las relaciones humanas y en el uso de diversos métodos y procedimientos en los que la reflexión, la integración de creencias y valores, el análisis, la aplicación de conocimientos, el juicio crítico y la intuición se vinculan a la creación de cuidados.

El arte de la enfermería es la aplicación más imaginativa y creativa del conocimiento al servicio de la humanidad. Por ello, los profesionales de la enfermería deben integrar los conocimientos de las artes, las humanidades y las ciencias sociales y del comportamiento en el proceso de atención a las personas.

La práctica de la enfermería puede considerarse como un ámbito de experiencia que incluye creencias y valores arraigados en la esencia de la disciplina, la aplicación de conocimientos y el ejercicio del juicio clínico que conduce a una intervención reflexiva.

Si analizamos los supuestos de Florence Nightingale, vemos que desde 1859 la enfermera tenía una idea clara de la enfermería como arte de cuidar: “…… La enfermería es un arte, y si ha de ser un arte, requiere una devoción tan desinteresada, una preparación tan minuciosa, que es como el trabajo de un pintor o de un escultor, pero ¿puede un lienzo muerto o un mármol frío compararse con el trabajo sobre un cuerpo vivo, el templo del Espíritu de Dios? Es una de las bellas artes, e incluso diría que una de las más bellas …… .” .

Ha transcurrido más de un siglo desde las suposiciones de Florence Nightingale y, en ese tiempo, varias enfermeras han intentado definir sus propios campos de investigación y práctica, desarrollando marcos conceptuales, teorías y filosofías de la enfermería para aclarar la naturaleza y los principios de la misma. A menudo denominadas teóricas y metateóricas, estas enfermeras intentaron delimitar el campo de las disciplinas de la enfermería basándose en sus propias y singulares perspectivas y en sus propios procesos de reflexión, conceptualización e investigación. El objetivo de la disciplina profesional es desarrollar conocimientos que ayuden a definir y orientar la práctica.

La enfermería como ciencia y profesión está evolucionando, pero cualquier cambio, y mucho más su fortalecimiento, debe estar apuntalado por una teoría que le dé sentido y método, y una práctica que la haga útil y práctica.

Intentar explicar la realidad y acercarse a ella con un modelo de atención sin hacerlo sistemáticamente sigue siendo una mera actividad intelectual. Aplicar un procedimiento de enfermería sin un modelo teórico sólo sirve para sistematizar acciones aisladas que sólo tienen sentido para la persona que aplica el procedimiento.

Una práctica es científica si sus acciones se basan en una teoría de desarrollo científico y en un enfoque sistemático para resolver problemas en su ámbito de competencia.

La práctica científica de la enfermería requiere la adopción de una teoría que dé sentido a la realidad de los cuidados y un enfoque sistemático para la definición, organización, aplicación y evaluación de las intervenciones de enfermería. Hoy en día, dado el nivel de desarrollo de la disciplina, la práctica científica enfermera adopta el modelo de cuidados como marco teórico y el proceso enfermero como metodología. Ambos denotan la epistemología de la enfermería, entendida como su base y método de conocimiento.

Podemos decir que es una ciencia que requiere habilidades intelectuales, interpersonales y técnicas, aplicadas a través de un método científico de actuación, caracterizado por una filosofía teórica que orienta y sustenta cada uno de sus componentes, apoyada en la investigación que regula la práctica profesional. Aunque hay varias formas de enriquecer el cuerpo de conocimientos de la ciencia de la enfermería, la investigación es el principal proceso de generación de conocimiento científico.

La investigación proporciona a la enfermería un cuerpo de conocimientos, que incluye leyes, teorías e hipótesis que están en continuo proceso de desarrollo, lo que significa que la enfermería mejora constantemente su base teórica y permite describir, tratar, interpretar e incluso predecir los fenómenos que surgen en la práctica.

La investigación se lleva a cabo mediante procedimientos detallados y rigurosos, que ponen en práctica lo que se conoce como método de investigación científica.

La investigación científica es un conjunto planificado de acciones que pueden

  • Resolver un problema científico específico en su totalidad o en parte.
  • Rechazar los supuestos de las teorías existentes.
  • Crear y probar nuevas teorías.

Es importante destacar que la investigación se encuentra en el centro de la dialéctica entre teoría y práctica en la formación del conocimiento científico, ya que es en la práctica donde se obtienen los datos y se confirman los supuestos teóricos de las nuevas teorías.

Muchos autores sostienen que la práctica es la base y la norma de la verdad porque es donde se aplican las observaciones de los fenómenos, las herramientas y los resultados y se validan mediante la experiencia práctica. Los profesionales de la enfermería deben utilizar los resultados de su propia práctica clínica en sus investigaciones, ya que la práctica debe considerarse una fuente de conocimiento. El conocimiento científico es el resultado de la investigación, que ancla el marco teórico y constituye la base de la ciencia y su desarrollo.

La investigación en enfermería debe utilizar el método científico, lo que permitirá que la práctica se base en pruebas científicas que confirmarán las suposiciones previas sobre el fenómeno estudiado o confirmarán la necesidad de abandonar las suposiciones previas. Tiene el gran reto de apuntalar las nuevas teorías con elementos sólidos que desarrollen una revolución y consolidación en la ciencia.

Fue el enfoque particular de las enfermeras sobre la relación entre la enfermería, las personas, la salud y el medio ambiente lo que llevó a la clasificación del área temática de la ciencia de la enfermería.

La enfermería sigue siendo la razón de ser de la profesión y es el objeto de su estudio, por lo que es necesario hacerla objeto de los estudios de enfermería. Esto consolidará científicamente el cuerpo de conocimientos y los fundamentos y principios en los que se basan la educación, la gestión y los cuidados de enfermería.

Conclusión de Ensayo sobre la enfermería

Comprender los hechos históricos nos ayuda a definir el papel de la enfermería a través de los métodos de investigación y nos obliga a aclarar los fundamentos filosóficos de la profesión. Dado que tanto los profesionales de la enfermería como las personas a las que cuidan son objeto de estudio e investigación, ésta nos ayuda a describir con precisión el comportamiento humano.

El conocimiento de la etapa histórica del desarrollo de la enfermería es una parte clave e indispensable para dar forma a la próxima generación, eligiendo los métodos y las técnicas que tenemos hoy en día para garantizar que la investigación y los resultados obtenidos de esta investigación sean fiables y válidos.

El reto para el futuro es mantener el interés por aprender e investigar el pasado de la industria, mejorar lo que se ha desarrollado hasta ahora y consolidar desarrollos futuros más fuertes para hacer evidentes los objetivos y aumentar la conciencia profesional en beneficio de nuestra industria y población.

Sólo así podremos dejar nuestra huella en los distintos estudios y dar así a otras generaciones una visión más amplia de los temas y su desarrollo.

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